"El enamoramiento se funda en la atracción física, habla con ella y descubrirás que no tienen nada en común". Barney Gómez
Te topas con alguien por vez primera, efecto imán.
Le miras, te mira, te habla, le hablas...
estás a punto de perder la compostura, luchas contra eso, después se lo confiesas, te vas, se va.
Pasa algún tiempo.
Te llama...el corazón sale casi rebotándote del pecho, qué voz su voz.
Ahí vas a perseguirlo cuando fugazmente se acerca unos kilómetros.
Te apenas.
Cambio de residencia, los kilómetros entre los dos se reducen de centenas a unidades.
Tratan de coincidir, pero nunca lo hacen.
Un día el universo conspira, por fin coinciden, pero al otro día los kilómetros de unidades se convierten en millares.
Regresas y vuelves a ir periódicamente.
Ahora es él quien lo confiesa todo, te pide que arriesgues y tú...estúpidamente, sabiendo que no es tu momento, influenciada por el fuking "efecto imán" aceptas.
Te ilusionas, hacen planes.
Eventualmente los kilómetros pasan de centenas a unidades.
Te dejas seducir, aquel efecto imán es incontrolable, te dejas llevar, pasa lo que nunca imaginaste que pasara...en ese momento algo dentro de ti comienza a decirte que no sólo basta aquel efecto del que eres presa, sino algo mas profundo, hace falta amor...te detienes, te confundes, tienes la seguridad de que para él solo significas dicho efecto, a fin de cuentas, es hombre...tonta, no idealices.
....
Te asustas, no sabes lo que quieres ni mucho menos lo que el quiere de ti.
Un día te enteras de que si...te quiere.
Tu no sabes si es "efecto imán" o también comienzas a quererle, por eso no se lo dices.
....
Pasan los días, todo va bien hasta que los kilómetros y las personalidades comienzan a representar un problema.
¡Pero qué bien nos vemos juntos! pensaba el par de necios egocéntricos que sin querer queriendo también compiten y hasta mal se caen aveces.
Nadie tiene la culpa de ser cómo es.
Simplemente son dos personas completamente diferentes unidas por el deseo.
Y si la vida fuera solo eso..."deseo" estarían hechos el uno para el otro.
Los espejismos no sólo se encuentran en el desierto.
....
Ella sigue deseándole.
El también
Ella lamenta otro fracaso.
El trata de mostrarse indiferente.
¿Podrán superar un día el efecto?
¿Querrán llegar a algo más?
Ella también le quiere...
2 comentarios:
Tan cierto tu post, como la vida misma...
Complejidad absoluta, miedos e imanes.
Un beso
Difiero un poco. La descripción de amor que das es virtual. Me explico: cuando tratamos con las demás personas omitimos varias cosas para poder lidiar con ellas. Sabemos, por ejemplo, que defecan, que alguna vez se han masturbado, que producen cerilla, mocos, pus, etc...
Nunca lidiamos con las personas directamente; para hacerlo es preciso crear una imagen virtual. El amor que describes se acerca más a eso: a una idealización, a ver lo que quieres ver en la otra persona. No se trata de desear a la otra persona o de ser cada quién como es: es sobre admitir que todos somos un error.
Este mundo es un error. Amar significa elegir un ser pequeño, frágil, débil, un error más, y llevar ese pequeño error hasta las últimas consecuencias, lejos de toda ilusión de atracción física o fantasías sobre la vida en pareja, etc...
No es sobre dejarse llevar o no dejarse llevar. El amor es cuestión de voluntad, no de deseo: por eso es destructivo (los deseos pueden controlarse, la voluntad no), por eso es un error genial.
Aquí un link interesante:
http://es.youtube.com/watch?v=DhDuYfZa5dE
"Isn't love this kind of cosmic imbalance?"
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